El control de calidad en los alimentos consiste en una serie de requisitos basados en comprobar unos cuántos parámetros con el objetivo de verificar el conjunto de características que garanticen la salubridad y calidad de un producto
Seguridad alimentaria
La seguridad alimentaria es la máxima de todas las empresas del sector alimentario y el objetivo de todos los procesos de los departamentos de calidad.
El Reglamento (CE) 183/2005 establece la obligatoriedad de disponer de un plan de muestreo y análisis en una empresa alimentaria.
Garantizar la seguridad e inocuidad alimentaria es un trabajo complicado. Sobre todo en ciertos sectores agroalimentarios donde la importación y exportación de materias primas está a la orden del día.
El responsable o jefe de calidad en alimentos es un cargo sumamente importante dentro de la industria alimentaria. ¿Te has preguntado en alguna ocasión cuáles son las funciones que debe cumplir este perfil profesional?
¿Sabías que todas las empresas alimentarias están obligadas a contar con un sistema de gestión de la inocuidad alimentaria como es el APPCC? El APPCC es el método de control por excelencia de la industria alimentaria, y su importancia en la inocuidad es vital.
Dentro del ámbito de la fabricación de alimentos existen multitud de directrices y normativas aplicables. Una de ellas es la normativa GMP, suponiendo un pilar fundamental para los productores y fabricantes de alimentos en todo el mundo.
Durante todo el proceso de elaboración de alimentos en la industria alimentaria se lleva a cabo un control riguroso en todas y cada una de las etapas de elaboración.
El control de la seguridad en la industria alimentaria permite que los consumidores adquiramos alimentos sin riesgos en distintos establecimientos como supermercados.
Generalmente, los Técnicos de Control de Calidad trabajan con Responsables, Directores o Gerentes encargados de Calidad, tanto de producto como de procesos, con el objetivo de analizar y resolver problemas relacionados con éstos y mejorar así la productividad.
Las toxiinfecciones alimentarias constituyen un problema de salud pública que no disminuye, aunque se adopten mejoras preventivas en los diferentes ámbitos que intervienen en su aparición.