Los detectores de metales constituyen uno de los elementos más importantes dentro de la cadena de producción y elaboración de alimentos. Son dispositivos íntimamente ligados con el correcto desempeño de la seguridad alimentaria. De hecho, un detector de metales en industria alimentaria suele ser clasificado como punto de control crítico (PCC) en los sistemas de APPCC.
Qué es un detector de metales en industria alimentaria
Utilizar un detector de metales en la industria alimentaria tiene grandes ventajas. Los detectores de metales se utilizan para detectar la presencia de pequeñas cantidades de metales en los alimentos. Estos detectores se utilizan principalmente en la industria alimentaria para garantizar la seguridad de los alimentos y evitar la presencia de piezas de metal en los productos envasados que se venden al público.
Los detectores de metales funcionan mediante la emisión de un campo magnético que atraviesa los alimentos. Si hay algún tipo de metal presente en los alimentos, el campo magnético será interrumpido y el detector emitirá una señal de alarma. Gracias a esto, los operarios pueden detectar la presencia de cualquier pieza de metal (brida, alambre o un clavo) y retirarla antes de que el producto se envíe al mercado.
Hay diferentes tipos de detectores de metales disponibles en el mercado. Cada uno de ellos se adapta a diferentes necesidades y requerimientos de la industria agroalimentaria que lo implanta dentro de su línea de producción. Los detectores de metales pueden ser portátiles o fijos, siendo utilizados en diferentes etapas del proceso de producción, desde la recepción de materias primas hasta el empaquetado y el almacenamiento de los alimentos. Aunque lo habitual es utilizarlos en las últimas etapas del envasado, para garantizar la ausencia de metales en el producto final.
Beneficios de utilizar detector de metales en industria alimentaria
La presencia de piezas de metal en los alimentos es muy peligrosa para la salud. Puede desembocar en lesiones graves en la boca, el esófago o el intestino si se ingieren accidentalmente, así como atragantamientos. Por esta razón, la detección de metales en los alimentos es una parte esencial del proceso de producción en la industria alimentaria.
Además de garantizar la seguridad de los alimentos, los detectores de metales también son importantes para proteger la reputación de las empresas alimentarias. Un solo caso de piezas de metal en alimentos finales elaborados puede dañar gravemente la reputación de una empresa y provocar pérdidas económicas importantes. Como un beneficio añadido, los detectores de metales ayudan a prevenir estos incidentes y proteger la imagen de las empresas agroalimentarias
En resumen, los detectores de metales son dispositivos importantes en la industria alimentaria, ya que ayudan a garantizar la seguridad de los alimentos y proteger la reputación de las empresas alimentarias. Su uso es fundamental para evitar la presencia de piezas de metal en los alimentos y garantizar que los alimentos suministrados y vendidos al público final sean seguros para el consumo.