En un contexto de transformación ecológica y nueva legislación europea, reducir las emisiones en la industria agroalimentaria ya no es una opción, sino una prioridad. Las empresas del sector tienen ante sí el reto, y la oportunidad, de adaptarse, reducir riesgos y mejorar su competitividad mediante una estrategia climática clara.
España, como uno de los principales productores agroalimentarios de Europa, se sitúa en una posición clave. Este artículo recoge las 7 acciones más efectivas para reducir emisiones en empresas agroalimentarias, con foco en los marcos regulatorios actuales, herramientas prácticas y casos aplicables.
1. Medición precisa de emisiones de Alcance 1, 2 y 3
Antes de reducir, es imprescindible medir.
Una empresa agroalimentaria debe calcular su huella de carbono siguiendo el estándar del GHG Protocol, que agrupa las emisiones en tres alcances:
- Alcance 1: emisiones directas (combustión en calderas, maquinaria, transporte propio).
- Alcance 2: emisiones indirectas asociadas al consumo de electricidad comprada.
- Alcance 3: emisiones indirectas a lo largo de toda la cadena de valor (proveedores, distribución, uso del producto, etc.).
En sectores como el agroalimentario, el Alcance 3 suele representar más del 80% de las emisiones totales.
Claves prácticas:
- Empezar con una herramienta como Trazable Life Cycle, que permite recopilar datos de forma automatizada.
- Enfocarse primero en las categorías de Alcance 3 más relevantes: materias primas, transporte y envases.

2. Optimización de la eficiencia energética en plantas de producción
Uno de los focos principales del Alcance 1 y 2 son las propias instalaciones.
Las empresas agroalimentarias que invierten en eficiencia energética logran no solo reducir emisiones, sino también costes operativos.
Acciones clave:
- Sustitución de calderas por bombas de calor industriales o calderas de biomasa.
- Monitorización del consumo eléctrico por línea de producción con sensores IoT.
- Implementación de sistemas de recuperación de calor en procesos térmicos.
Caso real: Mahou San Miguel ha logrado reducir un 42% sus emisiones de Alcance 1 y 2 en sus fábricas mediante inversiones en eficiencia y autoconsumo.
3. Sustitución de energía fósil por fuentes renovables
El paso hacia el autoconsumo energético o contratos de energía renovable (PPA) es otra de las medidas más directas para reducir el Alcance 2.
Opciones viables en el sector agroalimentario español:
- Instalación de paneles solares en cubiertas industriales o zonas de cultivo.
- Compra de electricidad con garantía de origen 100% renovable.
- Acuerdos de autoconsumo colectivo en zonas rurales.
Enlace útil: Subvenciones para autoconsumo en industria agroalimentaria (IDAE)
4. Reducción del desperdicio alimentario y aprovechamiento de subproductos
La pérdida y el desperdicio de alimentos generan cerca del 8% de las emisiones globales.
En una empresa agroalimentaria, reducir mermas supone:
- Disminuir emisiones en producción innecesaria.
- Evitar transporte, refrigeración y residuos evitables.
- Reaprovechar subproductos para biogás, alimentación animal o nuevos ingredientes.
Ejemplos:
- Empresas cárnicas que transforman recortes en proteína para piensos.
- Fábricas conserveras que valorizan residuos orgánicos como compost o biofertilizantes.
Caso destacado: Grupo La Caña (Granada) ha desarrollado procesos de economía circular para reutilizar residuos de hortalizas.
5. Revisión del packaging con criterios de sostenibilidad y circularidad
Los envases representan una parte importante del impacto climático en alimentación, especialmente en el Alcance 3.
Reducir sus emisiones pasa por:
- Diseñar envases más ligeros y reciclables (plásticos monomaterial, cartón certificado FSC, etc.).
- Sustituir materiales vírgenes por reciclados o de origen vegetal.
- Apostar por sistemas de reutilización o recarga, especialmente en HORECA o B2B.
Enlace útil: Ley de Residuos y Suelos Contaminados 2022
Además, el Real Decreto de envases y residuos de envases (2022) obliga a reportar y reducir este tipo de impactos, alineando el diseño con los principios de la economía circular.
6. Trabajo activo con proveedores y agricultores para reducir emisiones en origen
Gran parte del impacto de la industria agroalimentaria está en el campo. Por eso, colaborar con proveedores en origen es una de las acciones más potentes.
Líneas de actuación:
- Priorizar cultivos de producción local y de bajo impacto (menos fertilizantes, menos consumo hídrico).
- Fomentar la agricultura regenerativa, que captura carbono en el suelo.
- Incorporar cláusulas climáticas en contratos de aprovisionamiento.
Caso inspirador: Danone España ha implementado proyectos piloto con ganaderos para reducir metano y huella de leche cruda.
Herramienta recomendada: Cool Farm Tool – mide emisiones agrícolas por cultivo o explotación.
7. Formación interna y cultura climática
Sin el compromiso del equipo, cualquier estrategia climática se queda en el papel.
Formar y sensibilizar a las personas de la organización es clave para lograr una reducción de emisiones transversal y duradera.
Ideas para empezar:
- Integrar criterios de sostenibilidad en las formaciones de onboarding.
- Crear un equipo transversal de sostenibilidad en planta y oficinas.
- Promover retos internos de reducción de emisiones o “ecoideas” premiadas.
Enlace: Pacto por una Economía Circular de AECOC
Además, la nueva Directiva CSRD obligará a muchas empresas del sector a reportar indicadores climáticos y de sostenibilidad a partir de 2025. Prepararse desde ya implica formar, auditar e integrar.
FAQs sobre reducción de emisiones en empresas agroalimentarias
¿Qué tipo de empresas están obligadas a reportar su huella de carbono en España?
A partir de cierto tamaño, y especialmente si exportan o trabajan con distribuidores europeos, muchas empresas agroalimentarias deben reportar según los marcos del GHG Protocol, EINF o CSRD.
¿Qué ayudas existen en España para reducir emisiones en la industria agroalimentaria?
El IDAE y los fondos NextGen ofrecen subvenciones para autoconsumo, eficiencia energética o digitalización con impacto en sostenibilidad.
¿Qué es la agricultura regenerativa y por qué es relevante?
Es un tipo de agricultura que mejora la salud del suelo, captura carbono y reduce fertilizantes, lo que permite reducir emisiones y aumentar la resiliencia climática.